La UE busca reducir accidentes con los sistemas ADAS, incluyendo un dispositivo que registra datos antes y después de un siniestro para investigar lo ocurrido. Así, los automóviles de nueva matriculación en España (y en el resto de la Unión Europea) deberán contar con una caja negra obligatoria desde el próximo 7 de julio.
El 7 de julio de 2024 marcará un antes y un después en la historia del automovilismo europeo. A partir de esta fecha, todos los coches nuevos matriculados en España deberán llevar una caja negra, según ha informado el Real Automóvil Club de España (RACE). Esta medida, impulsada por la Unión Europea, tiene como objetivo reducir los accidentes de tráfico mediante la implementación de los sistemas ADAS (Sistemas Avanzados de Ayuda a la Conducción).
Este dispositivo, conocido formalmente como sistema EDR (Registrador de Datos de Eventos), es una especie de gran hermano automovilístico que registrará hasta el último suspiro de nuestros viajes. Su tamaño, similar al de un teléfono móvil, permitirá recopilar datos cruciales antes, durante y después de un accidente, información que será esencial para investigar los siniestros y mejorar la seguridad vial.
¿Cuánto Control es Demasiado Control?
José Iglesias, asesor técnico del RACE, nos asegura que este dispositivo registra y borra datos continuamente, conservándolos solo en caso de un accidente grave. Así, si se despliega el airbag, la caja negra guardará los 30 segundos previos y los 5 segundos posteriores al impacto. Sí, así de precisa es esta pequeña caja de pandora.
Datos Registrados por la Caja Negra
- Momento de la frenada
- Velocidad del vehículo
- Fuerza del impacto frontal y lateral
- Revoluciones del motor
- Movimientos de dirección
- Posición del acelerador
- Funcionamiento de sistemas de seguridad como los airbags o el cinturón de seguridad
- Condiciones meteorológicas en el momento del impacto
- Parámetros como el día y la hora del accidente
Para acceder a estos datos, se utilizará el puerto OBD del coche o un puerto propio en la caja negra, y este acceso estará restringido a las autoridades competentes encargadas de reconstruir el accidente. Aunque no se registran datos personales como el nombre o la edad del conductor, la realidad es que la privacidad parece más un mito que una garantía en estos tiempos de hipervigilancia.
Obligaciones y Repercusiones
Desde 2022, esta caja negra es obligatoria en todos los vehículos homologados por la UE. La normativa se aplica a turismos de clase M1 (vehículos con un máximo de 8 plazas, además del conductor) y a vehículos comerciales de tipo N1, incluyendo camiones y furgonetas de menos de 3.500 kg de peso. La caja negra se ubicará estratégicamente bajo el asiento del conductor, atornillada al chasis y conectada a la centralita del coche.
Pero no todo es tan sencillo como parece. La responsable de asistencia jurídica del RACE advierte que esta medida podría tener efectos contrapuestos. Por un lado, algunos conductores podrían sentirse vigilados y experimentar estrés; por otro, la conciencia de estar siendo registrados podría inducir a una conducción más prudente y responsable, reduciendo así las infracciones.
Objetivos y Ambiciones de la UE
La implementación de estas medidas es vista por la UE como una herramienta para evitar hasta 25,000 muertes y más de 140,000 heridos graves en Europa en los próximos 15 años. La ambición final es alcanzar cero muertes en carretera para 2050, un objetivo tan utópico como necesario para garantizar la seguridad de todos los usuarios de las vías.
La pregunta que queda en el aire es si esta vigilancia constante será realmente el camino hacia la seguridad, o si acabará convirtiendo nuestras carreteras en una extensión más del ojo que todo lo ve. Lo que está claro es que, a partir de julio, el coche que conducimos será más que nunca un testigo silencioso de nuestros viajes.
HERALDO SANITARIO y POLÍTICO - SATÍRICO DE OREGÓN 